lunes, 17 de septiembre de 2012

CLAUSTROFÍLICO

enfermo de encierro... 
de este aire enclaustrado, 
de la luz artificial, 
de mis sábanas enfermas, 
de mi incómoda cama, 
de mi piso y de mi alfombra...

estoy enfermo de encierro... 
de la tele y los estúpidos programas, 
de la radio que no copa, 
o de la radio 
que copa y me exaspera, 
de la falta de cigarros 
y la falta de cerveza...

enfermo por la sobra de esperanzas, 
por los ojos que no dejan de derretirse, 
por el calor sofocante, 
por los delirios de una realidad alterna...

a veces, 
cuando se escapa 
una ráfaga de fresco viento 
y llega golpeándome la cara, 
mis ojos se elevan 
suplicantes de llanto y oscuridad...

paso mis manos melancólicas por mi rostro, 
anhelantes de la brisa,
envidiosas de mis labios 
en los que todavía subsiste 
el último trozo de hielo...

el oxígeno decrépito 
termina envenenándome 
de tristeza y adhiriendo 
fuego al flujo de nostalgias...

el cielo que yace 
tan falso y cerca 
me vuelven impotente, 
nervioso 
y paranoico...

las sobras de esperanzas 
vienen en paquete 
con padresnuestros...

mis ojos terminan clavados 
en las manchas oscuras y escarlatas 
que se dibujan cuando se cierran...

mis manos terminan derrotadas, 
el hielo se ha acabado 
y vuelven a emanar 
suspiros de mis labios...

estoy enfermo de encierro... 
de puertas cerradas y 
de universos pequeños...


 Recordado por Isaac

martes, 4 de septiembre de 2012

Nauseabundas
escenas,
casi tan grotescas
como el "ser"
escriben
en las paredes
de los colectivos
y en las esquinas
en búsqueda
de la verdad,
mientras
que las
cacerolas se
convierten en
espejos de estos
días,
mi
cerebro
se rehúsa
al mundo actual,
quiere volver,
a esos otros días
donde los mates
 (jaque!)
eran
realmente
más
faciles

domingo, 2 de septiembre de 2012

Queremos
ser
nubes pasajeras
dentro del tren
de las vidas tranquilas,

pero sin darnos cuenta,
mientras soñamos con estar
dentro,
vemos todos
los paisajes
desde la vía,
juntos
o
separados