Seguramente el lugar a donde van a parar no solo los
cigarrillos ya quemados, sino también las pequeñas
bizarrías que el fuego, la charla y el humo conllevan.
miércoles, 20 de julio de 2011
Entre la humareda de un cuarto lleno de inciensos,
muero ahogado entre las piernas de una mujer
Perfecta
como los cielos azules o los vagones vacíos,
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