lunes, 9 de agosto de 2010

Me subo al tren en Padilla. Se ve como una gran carcel.
Una de esas carceles en las que, una vez que entras,
te quedas ahi, de por vida.

Durante los 4.38 minutos de viaje,
el aire sufre un cambio.
Los olores, las miradas, los colores.

4.19 minutos, y el tren llega a un movimientocero.
No puede ser, ¿adelantado?
Miro por la ventana, y no se ve el anden
meparo de mi asiento,y me siguen las miradas los que están ahi.

Me asomo a la puerta, y veo algo tirado.
Alguien.
Me siento de vuelta, y espero a que lleguemos, pensando.
pienso, piensopienso.
Lo unico que se puede hacer en la carcel.

4.52, llego a destino. Me bajo y camino.
Me siento libre,
como el reo liberado.
Camino, espero, me subo al bondi.

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